Cuando hablamos de un negocio ya sea vendiendo productos o servicios, siempre se suele decir aquella frase de que «el cliente manda». Sin embargo, en el mundo del arte no es así. Y especialmente en mundillo del tatuaje. En Tatuantes hemos tocado en alguna ocasión el controvertido tema de aquellos tatuajes que un tatuador se puede negar a hacer. Un claro ejemplo son los tatuajes en las manos.
Ahora bien, ¿es lógico que un tatuador decida negarse a hacer un tatuaje determinado? Claro que sí. El tatuador es un artista y como tal está en todo su derecho para elegir qué tipo de obras plasma de manera permanente el cuerpo de sus clientes. Estamos acostumbrados a acudir a un estudio de tatuajes con una idea en mente y al cabo de unos días tener nuestro nuevo tattoo. Sin embargo, hay algunos tipos de tatuajes que, por la controversia que generan, son motivo de negación por el tatuador.
Pero, ¿qué tipo de tatuajes se puede negar a hacer un tatuador? Los más comunes que suelen negarse a hacer los tatuadores son aquellos que transmiten un mensaje político-social asociado con la extrema derecha o izquierda. Los extremos no son buenos en ningún aspecto de nuestras vidas, y en la política más aún. Por ello, es muy común que haya tatuadores que se nieguen a hacer tatuajes de emblemas o diseños asociados con el partido nacional socialista alemán o un tattoo de un elemento asociado con la versión más extrema del comunismo.
Cabe dejar claro que un servidor no va a entrar en detalles sobre si esto está bien o mal. Simplemente me limito a transmitir la información que tengo respecto al tema tras consultar con varios tatuadores y conocer la opinión de otros tantos. Pero, siguiendo con los tatuajes que un tatuador se puede negar a hacer, tenemos más opciones que pueden llevarnos a encontrarnos con la respuesta negativa de un artista del tatuaje a hacernos nuestro tattoo deseado.
Es normal que cualquier tatuador que tenga un mínimo de principios se niegue a hacer un tatuaje que transmita un mensaje xenófobo o racista. Independientemente del tamaño o lugar en donde queramos tener el tattoo.
Y por último, tenemos los tatuajes en zonas «sensibles» de nuestro cuerpo. Es decir, manos, cara y cuello. Especialmente cuando se trata de «novatos» dentro del mundillo del tatuaje, los tatuadores suelen ser muy reticentes a tatuar en zonas del cuerpo tan visibles ya que puede haber posibilidad de arrepentirse después de hacerse el tattoo. Sin embargo, cuando nos encontramos con personas que ya tienen gran parte de su cuerpo tatuado, digamos que esta posibilidad queda descartada.
¿Mensaje xenóbo? ¿Y qué simbolos entrarían en ese apartado? La esvástica, por ejemplo, aunque sea asociado a los nazis ya se utilizaba por pueblos indoeuropeos como los germánicos y celtas, además de también en pueblos de la asia oriental… Pasa con muchos simbolos que hoy consideramos racistas sin tener ni idea de cual es su verdadero origen. Así que, si un tatuador se niega a tatuar un símbolo por ignorancia me parece bastante injusto.
Evidentemente podríamos entrar en el debate sobre si una esvástica por si sola es un elemento que tenga una connotación negativa. En tu argumento estoy de acuerdo contigo, sin embargo, para un tatuador puede ser complicado adivinar sobre la ideología de un cliente a no ser que su estética y formas le delaten. Un tatuador, al igual que cualquier otro profesional, está en su pleno derecho de admitir o rechazar a cualquier cliente que llegue a su estudio que, a fin de cuentas, es un negocio.