En muchas ocasiones hablamos de la importancia de cuidar y proteger la piel durante el verano para protegerla del sol y evitar que los tatuajes puedan verse afectados de manera directa o que, con el paso del tiempo, envejezcan de peor manera. Pero, ¿y qué hay de la época más fría del año? Los cuidados de los tatuajes en invierno son igualmente importantes. Especialmente si se reside en una zona en la que las temperaturas caen en picado.
A falta de pocos días para que entre en vigor de manera oficial el invierno, hace jornadas que estamos viviendo bajas temperaturas, lluvias y las primeras nevadas ya han llegado. Es un momento perfecto para repasar los cuidados de los tatuajes en invierno. O más bien, el principal cuidado que debemos tener presente si queremos que nuestros tatuajes luzcan como recién hechos por mucho más tiempo.
¿Qué debemos tener presente? Si nuestra piel tatuada está expuesta al frío durante un tiempo considerable, ya sea durante nuestra jornada laboral o por salir a hacer deporte, deberemos vigilar que esté correctamente hidratada. El frío afecta de manera muy negativa a la piel, y hay personas que ya de por si tienen una piel seca. Es muy habitual que en las manos aparezcan heridas debido a que, literalmente, la piel se agrieta. Pues imaginemos qué efecto tienen esto sobre los tatuajes.
Lo mejor es que tras una jornada dediquemos unos minutos para hidratar la piel. Y si durante el día podemos hacerlo, debemos evitar que la piel esté expuesta directamente al frío. Utilizar guantes y ropa de abrigo en la medida de lo posible es un factor clave. Son los principales cuidados de los tatuajes en invierno. Medidas sencillas pero que ayudarán a que nuestros tatuajes estén perfectos de cara al próximo verano.