¿Es normal tener que retocar un tatuaje nuevo?

Hace unos días, un colega me comentaba que hacía poco se había hecho un tatuaje pero que, a pesar de que se lo había cuidado bien, había perdido el color en algunas zonas.

Aunque no era el primero que se hacía, si era el primero en color que se hacía. Su tatuadora, como buena profesional, lo solucionó enseguida y se lo repasó. Pero ¿es normal tener que hacerlo?

Los buenos cuidados ayudan, pero también tu tipo de piel y otros factores

Evidentemente, si te cuidas mal un tatuaje tendrás más posibilidades de que no se cure bien y se vea envejecido al poco tiempo. Sin embargo, también existe la posibilidad de cuidarlo con todo el cariño del mundo y que haya zonas que pierdan color.

Esto es debido a varios factores. Por ejemplo, que tu piel escupa más tinta de lo debido y no la absorba bien. También puede ser debido a la zona del cuerpo donde te hayas tatuado (por ejemplo, la parte interior del brazo acostumbra a dar más problemas que el tobillo).

¿Cuál es la solución para un tatuaje que ha perdido el color?

En el caso de la pérdida de tinta, la solución es retocar el tatuaje. Normalmente se acostumbra a hacer un mes o mes y medio después de haberlo realizado, para darle tiempo a curarse. Sin embargo, debes tener en cuenta que retocar un tatuaje duele bastante más que hacérselo. Esto es debido a que el tatuador está entintando una herida cicatrizada, pero bastante reciente.

Recuerda que, si tienes cualquier duda sobre tu tatuaje, lo mejor que puedes hacer es hablarlo con tu tatuador. Él o ella te dará la solución más acertada y te recomendará qué debes hacer. ¡Sigue sus instrucciones al pie de la letra para que tu tatuaje esté siempre como nuevo!