¿La pérdida de peso afecta a los tatuajes visualmente? ¿Y si ganamos músculo, o nos hacemos viejos, o se está embarazado? ¿Pueden deformarse o cambiar de tamaño? ¿Hay tatuajes más propensos que otros a deformarse? Estas son algunas de las preguntas que muchas personas se hacen por diversos motivos.
Es posible que vayas a entrar al gimnasio y ganar una importante masa muscular o, por el contrario, quieras perder unos cuantos kilos. ¿Se verán mal tus tatuajes? ¿Es mejor esperarse a tener el peso deseado para tatuarse? La verdad es que hay un poco de leyenda urbana al respecto. A continuación intentaremos ayudarte respondiendo a las preguntas más frecuentes.
¿Qué le pasa a mi cuerpo cuando me tatúo?
Recordemos un poco qué le pasa a nuestro cuerpo cuando nos tatuamos antes de ver qué pasa cuando sufrimos cambios, como si nos adelgazamos y nos engordamos.
Básicamente, los tatuajes consisten en meter tinta debajo de la epidermis, es decir, en la dermis. Si no fuera así y el tatuaje se quedara en la capa más superficial de la piel, solo duraría unas pocas semanas, ya que las células externas cambian continuamente. Por eso el tatuador tiene que llegar un poco más abajo.
Como un tatuaje no deja de ser una herida (bueno, cientos de heridas microscópicas) el sistema inmune se activa para combatir la amenaza y envía al lugar a los fibroblastos, un tipo de célula que se tragará parte de la tinta para intentar eliminarla. Al tener esta función, podemos considerar que los fibroblastos son los “culpables” de que el tatuaje pierda un poco de intensidad a medida que se va curando.
¿Qué pasa si me tatúo y crece el músculo?
Ahora que ya hemos hablado de lo que pasa con nuestro cuerpo cuando nos tatuamos, ha llegado la hora de hablar de lo que supone la pérdida de peso (o el aumento, como en este caso) para los tatuajes. Así, pues, ¿afecta el aumento del músculo a la apariencia del tatuaje?
La respuesta corta es que no.
La respuesta un poco más larga dice que la piel está preparada para asumir los cambios de peso de manera equilibrada, y que es altamente improbable que notes algún cambio en tu tatuaje si has ganado músculo de manera natural (es decir, lentamente). No obstante, si el tatuaje lo tienes en algún lugar propenso a que aparezcan estrías (de los que hablaremos a continuación) sí que es probable que sufra algún cambio.
¿Puedo seguir entrenando si me tatúo?
Otra pregunta muy frecuente relacionada con este tema es sobre si podemos seguir entrenando en el gimnasio después de hacernos un tatuaje, en las semanas que necesita para curarse. La respuesta es que sí, pero sin pasarse: los primeros días es mejor descansar para tranquilizar a tu cuerpo y recuperarte, además, si la herida está muy fresca y sudas es más posible que pueda infectarse. No obstante, cuando la herida esté más o menos cerrada (cosa que depende de cada uno) ya podrás entrenar con tranquilidad y sin miedo a que tu tatuaje se deforme.
¿Qué pasa con mis tatuajes si adelgazo?
Si nos hacemos un tatuaje y perdemos unos pocos kilos de peso, no habrá efecto visible sobre el tattoo. No se verá afectado para nada. Ahora bien, si hablamos de una pérdida de peso importante de, por ejemplo, 20 kilogramos, la situación cambia. Junto a este artículo te mostramos una recopilación de fotografías que nos muestran el antes y después de personas que han bajado de peso y cómo lucen ahora sus tatuajes.
Poniendo especial atención a las imágenes, nos damos cuenta de que muchos tattoos que antes eran muy grandes y visibles, se han «encogido». Y en los casos más extremos de variación de peso, tanto en un lado como en otro, a nivel visual el tatuaje puede verse deteriorado siendo necesario pasar por un estudio de tattoos para que arreglar los “desperfectos” del mismo, aunque es algo que sucede exclusivamente en zonas donde acostumbran a aparecer estrías.
Por otra parte, es importante señalar que, como se puede ver en las imágenes, en la mayoría los casos, la importante pérdida de peso afecta a los tatuajes, pero no llega a deformarlos. A pesar de que varía su tamaño, siguen estando proporcionados. Y bajo mi experiencia personal, puedo decir que así es, los tattoos se ven afectados de manera acorde a los cambios que sufre el cuerpo.
¿Dónde se deforman menos los tatuajes?
Entre los mejores lugares para tatuarse sin miedo a que se deformen, tenemos que buscar aquellos lugares donde no aparezcan estrías y los que tarden más a acusar un aumento o un descenso de peso, por ejemplo, los tobillos, los pies, los antebrazos, los hombros… Si, además, los tatuajes en esta zona tienen un cierto tamaño, los cambios aún se apreciarán menos.
En cambio, hay una serie de lugares que casi garantizado que se agrandan o se empequeñecen con el tiempo, por ejemplo, la tripa o las caderas. Esto es especialmente vital para las personas que quieran tener hijos: ¡mejor tenerlos primero antes que hacerse un tatuaje en esa zona!
Además de la pérdida de peso, hay otro gran factor que puede determinar si un tatuaje se deformará con el tiempo: la edad. Así, si no quieres que tu tatuaje de vea lacio a medida que vayas haciéndote mayor, evita lugares donde la piel tienda a descolgarse y hacer bolsas, como el cuello.
Por último, aunque no menos importante, es recomendable evitar lugares donde haya junturas, como las muñecas, ya que con el paso del tiempo la piel se va dando de sí y puede afectar negativamente a la estética del tatuaje.
¿Hay tatuajes más propensos a deformarse que otros?
Y terminamos respondiendo a otra pregunta sobre la pérdida de peso en los tatuajes, si hay diseños que tengan más posibilidades de deformarse con los cambios que experimenta nuestro cuerpo que otros. En efecto, los tatuajes pequeños tienen más posibilidades de verse raros después de un aumento o pérdida de peso importante, mientras que los más grandes apenas muestran diferencias.
Por otro lado, y de manera muy lógica, los diseños simétricos también son más propensos a mostrar cambios después de los cambios de peso. Por el tipo de piezas que son, cualquier cambio puede hacerse visible, ya que la gracia consiste precisamente en esa geometría hipnótica tan chula. En estos tatuajes, por ejemplo, podríamos incluir los mandalas, los geométricos o los tribales.
La pérdida de peso en los tatuajes afecta mucho menos de lo esperado a los diseños, por suerte, aunque conocer la situación a fondo antes de tatuarnos es de ayuda para tomas la mejor decisión, ¿verdad? Dinos, ¿has adelgazado o engordado y estás tatuado? ¿Qué ha pasado con tus tatuajes, se ha cumplido lo que acabamos de contar o, por el contrario, ha sido totalmente diferente?
Fotos de Tatuajes tras la Pérdida de Peso
Fuente: Businessinsider
yo me hice un tatuaje en el pecho y la verdad si me fue muy doloroso, fueron 2 tatuajes unas letras del lado izq y del lado derecho un arlequin, primero fue el arlequin , tomo parte del pecho y la axila y esa parte fue la mas dolorosa, recomiendo que se lo hagan en otro lado x lo doloroso mas que nada saludos