Tatuaje curado: Cómo saber si un tatuaje ha sanado correctamente paso a paso

Tatuaje curado

Un tatuaje curado es fácil de reconocer, pero si es la primera vez que te haces uno, el proceso de sanación puede ser algo confuso. ¿Cómo puedes saber si tu tatuaje ha sanado correctamente? ¿Es normal que se pele? ¿Y que pique?

En este post, veremos paso a paso si un tatuaje se ha curado correctamente y que cabe esperar de cada fase. Recuerda que, si ves algo raro, lo mejor es que contactes con un profesional.

Primera semana: enrojecimiento y sensibilidad en la piel

Tatuaje curado espalda

Justo después de tatuarnos, el tatuaje se sentirá como una herida abierta. De hecho, eso es lo que es, y por eso es especialmente importante que lo cures correctamente y que sigas las instrucciones del tatuador.

Si notas la piel enrojecida, es normal, forma parte del proceso de cicatrización. Eso sí, si ves que te duele demasiado, consulta con tu tatuador.

Segunda semana: costras y picor

Para mí, esta es la peor semana de los tatuajes curados. El tatuaje ha creado una costra de tinta (¡que no debes arrancar bajo ningún concepto!) que se irá cayendo por si sola a lo largo de los días. Además, te picará horrores. Y es como la varicela: por mucho que te pique, no debes rascarte o puedes volver a abrirte la herida, con lo que puedes hacer que el tatuaje tarde más en curarse o algo peor: ¡cargártelo!

Tercera semana: colores apagados

Hombre tatuajes curados

Llegados a este punto, todas las costras del tatuaje curado ya deberían haberse caído, pero, aun así, el tatuaje aun está sensible, con lo que debes evitar los geles fuertes y el sol, que podrían dañarlo.

Además, los colores se verán algo apagados: eso es porque aún queda una capa de piel muerta de la que tu cuerpo aun no se ha desprendido.

¿Cómo sabré que mi tatuaje está curado?

Tatuajes curados brazos

Porque la piel tatuada tendrá la misma textura que el resto de tu cuerpo. Eso querrá decir que el tatuaje ya se ha curado correctamente, y podrás empezar a llevar vida normal. Piensa que, como la piel superficial tarda menos que las capas más profundas en curarse, esto puede llevar unas semanas más.

Y recuerda, si ves cualquier cosa rara, ¡pregunta a un profesional! Sabrán asesorarte como es debido.


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