Lo más probable es que, si te estás planteando hacerte un tatuaje en la cabeza, seas alguien ya versado en el mundo de la tinta, ya que estos tatuajes son conocidos por ser una de los tipos de tatuajes más “extremos” (tanto a nivel social, donde por desgracia no están muy bien vistos, como a nivel de dolor) que nos podemos hacer.
En todo caso, un tatuaje en la cabeza tiene unas especificaciones más peculiares que el resto de tatuajes.
Un tatuaje en la cabeza no es apto ni para gente tatuada novata… ni para tatuadores novatos
Que un tatuaje en la cabeza no es recomendable para hacerse un primer tatuaje es de sentido común: es una zona dolorosa y especialmente complicada, con lo que es recomendable que te conozcas a ti mismo. Con esto queremos decir que sepas la reacción de tu cuerpo a la tinta y a la aguja, de una manera similar a la que te recomiendan que te tiñas una parte del pelo antes de teñirte la cabeza entera.
Y, por eso mismo, es recomendable que el tatuador tenga experiencia en los tatuajes de cabeza si quieres que el resultado sea espectacular. La zona del cráneo tiene la piel más fina y tiende a sangrar más.
Recomendaciones para hacerse un tatuaje en la cabeza
Sentirás la aguja muy cerca y altísima, con lo que es recomendable llevar unos tapones para los oídos.
La sanación de un tatuaje en la cabeza no es exactamente la misma que la de otro tatuaje en el resto del cuerpo. El cuero cabelludo te picará una barbaridad, especialmente porque el pelo va a crecer. ¡No te rasques!
Sigue las indicaciones de tu tatuador. Es posible que tengas que ir a un peluquero a que te afeite la cabeza, ya que no es posible usar cuchillas normales (las pequeñas heridas que pueden hacerte pueden traerte problemas).