Uno puede llegar a querer sus tatuajes borrados si llega a aborrecerlos. Una de las maneras más efectivas de eliminarlos es a través del láser, aunque puede que este método, aún bastante nuevo (antaño iban a base de navajazos) te suscite algunas preguntas.
Si te interesa ver tatuajes borrados y el funcionamiento del láser ¡sigue leyendo!
¿Los tatuajes borrados desaparecen totalmente?
Aunque el láser sea una de las maneras más efectivas de borrar un tatuaje, lo cierto es que no se puede asegurar su efectividad con exactitud, ya que depende de cada persona. Aun así, la mayoría de los tatuajes no desaparecen del todo, sino que dejan una imagen blanquecina (conocida como tatuaje fantasma) o incluso zonas más oscuras donde la tinta no se ha podido eliminar por completo.
¿Funciona en todas las partes del cuerpo?
Curiosamente, los tatuajes borrados con láser obtienen mejores resultados mientras más cerca están del corazón, el centro de la zona circulatoria. A menor circulación, peor se deja borrar la tinta.
¿Cuántas sesiones de láser necesitaré?
Todo el mundo necesita como mínimo una sesión, aunque el número que te indiquen los expertos dependerá del tipo de tatuaje, de la zona, del tipo de tinta… ¡incluso de si lo ha hecho un profesional!
Generalmente, tienes que tener en cuenta que será un proceso largo, y que el tiempo entre sesiones acostumbra a ser hasta de dos meses entre sesión y sesión.
¿Tiene efectos secundarios?
El más común es el oscurecimiento o emblanquecimiento de la piel, pero suele corregirse con el tiempo (puede que hasta un año). Además, también existe el peligro de cambios en la piel y quemaduras.
¿Qué pasa después de borrar los tatuajes con láser?
La zona se hincha, se enrojece, puede sangrar un poco y hasta pueden aparecer ampollas. Recuerda que para cualquier duda siempre debes consultar con un experto.
¿Es muy caro?
Pues sí. Los tatuajes borrados llegan a costar hasta diez veces más que hacerse un tatuaje.