Somos mercancía. Cuando he pensado en hacer un post hablando sobre los tatuajes de códigos de barras, me ha venido a la mente ésa frase con la que he iniciado este párrafo. Y es que un conocido investigador español la suele utilizar y la verdad, razón no le falta. Hoy en día, en la sociedad moderna los ciudadanos de a pié somos prácticamente eso, pura mercancía. Es, en parte, por este motivo por el que se han extendido este tipo de tattoos.
La verdad es que nadie sabe muy bien cuándo se comenzó a tatuar códigos de barras en la piel, pero en la gran mayoría de personas, lo hacen a modo de crítica social sobre el sistema de vida que llevamos. Y es que hoy en día, “todo tiene un precio”. O mejor dicho, vivimos en la sociedad del consumo.
También se comenta que los tatuajes de códigos de barras denotan una esencia anticapitalista. Y es que para muchas personas, somos fabricados en masa, catalogados y rotulados. Si bien y dejando la lucha de clases ya que esto no es un blog político, hay personas que simplemente se tatúan un código de barras por diversión. En la mayoría de casos, terminan arrepintiéndose.
A día de hoy podemos decir que los tatuajes de códigos de barras han pasado de moda. Tuvieron su particular bum al igual que ocurrió con los tribales, los brazaletes de espinas o los tatuajes moríes. Y tú, ¿Qué opinas sobre este tipo de tattoos? Échale un vistazo a la siguiente galería.