Un tatuaje de electrocardiograma es increíblemente sencillo y permite muchas combinaciones especialmente emotivas, ya que puedes hacértelo en honor a alguien de tu familia o especial… ¡alguien que te haga latir el corazón muy deprisa!
Lee este post para saber más sobre estos tatuajes y cómo sacarles todo el partido ¡para que a la gente le de un vuelco el corazón!
Mi corazón palpita como una patata frita con estos tatuajes de electrocardiograma
Los tatuajes de electrocardiograma son una opción diferente a tatuarte el nombre de tu pareja (tienes o esta opción o hacer como mi hermana, que se tatuó Anastasio y ahora solo sale con gente que se llame así). Sin duda, es bastante más elegante (vale, con esto quería decir “más fácil disimular”) y el drama no lo será tanto si lo dejáis.
Aun así, tienes otras razones para tatuarte un electrocardiograma en alguna parte de tu cuerpo. Por ejemplo, por alguien de tu familia, amigos… En todo caso, suponemos que alguien especial, aunque hacerse un tatuaje así por el panadero de la esquina también tiene su gracia.
Tatuajes de electrocardiograma: solos o acompañados
Los tatuajes de electrocardiograma, además, pueden ir solos o ir acompañado de algún elemento (pequeñito…) como palabras, un corazón, el perfil de una ciudad… En fin, lo que haga que las manos te suden como un cochinillo en fiestas y que te ponga el corazón a mil.
¿Dónde quedan mejor los tatuajes de electrocardiograma?
Sin duda, el lugar más original, y que seguro que no te habrías imaginado nunca es… ¡el pecho!
Y, como hemos dicho en infinidad de ocasiones, los tatuajes pequeños piden lugares pequeños, por lo que los tatuajes de electrocardiograma son ideales para llevar en la muñeca, el brazo…
En fin, como puedes ver, el pequeño gran diseño de estos tatuajes da para mucho. Y tú ¿tienes algún tatuaje de electrocardiograma como estos? ¿Te gustaría hacerte alguno? ¡Cuéntanos en los comentarios!