Nunca nunca nunca de los jamases tendría los reaños de escoger alguno de estos tatuajes de payaso. Estos seres, habitantes de oscuros y estridentes templos de lentejuelas y plástico, me ponen los pelos de punta y habitan mis peores pesadillas.
Sigue leyendo si quieres enterarte de su simbolismo. Aunque ya aviso que la cosa no se pone mucho mejor…
Simbolismo de los tatuajes de payaso: más vale reír que llorar
Sorpresa. Los payasos no simbolizan una vida feliz en el país de las piruletas. Bueno, al menos no la inmensa mayoría. Un payaso contento puede simbolizar que te gusta hacerle bromas a la gente (el por qué escogería alguien tatuarse la cara amortajada y tintada de rojo de estas cosas ya es más difícil de entender).
El resto de tatuajes de payaso simbolizan otro tipo de cosas más oscuras. Tristeza. Depresión. Pérdida. Miedo. Terror. Ganas de salir corriendo.
Quien ríe último, ríe mejor
Supongo que eso deben pensar los payasos antes de matarte o de meterte en sus minúsculos coches. En todo caso, si te planteas hacerte un tatuaje de payaso, escoge un modelo que no de mucho miedo, por favor. Uno discretito, que no asuste al personal. Que somos muchos los coulrofóbicos que lo pasamos mal en fiestas infantiles y similares.
Y si no, opta por un diseño del que nadie pueda apartar los ojos. Manos demoníacas de guantes rotos, globos hinchados hasta que estén a punto de explotar, cuchillos ensangrentados y sucios de pintura blanca, la risa maléfica de quien va a encerrarte en tu propio armario y no va a dejarte salir ¡nunca!
En fin. Tatuajes de payaso: tu escoges. Yo, desde luego, hoy no pienso salir de casa, no vaya a ser que al girar la esquina me tope con el circo de los horrores.