No es la primera vez que nos encontramos con un famoso que ha cometido la temeridad de tatuarse en pleno vuelo. ¿Es una auténtica locura? El último en sumarse a esta bizarra lista ha sido Johny Manziel, el conocido «quarterback» de los Cleveland Browns. Aunque se define como un auténtico fan de Drake, Manziel ha emulando a Justin Bieber, quien en su día abriera la particular veda de los tatuajes a miles de metros de altura.
Aunque apenas encontramos imágenes del tatuaje en cuestión en las redes sociales, por lo que podemos apreciar se trata de un «lettering» de tamaño considerable situado en el antebrazo derecho. Realizado durante un vuelo del jet privado del jugador estadounidense, el tatuador que se prestó para realizar este tatuaje en estas condiciones muy poco idóneas fue Rafael Valdez (aquí su instagram).
En lugar de tatuarse en pleno vuelo, mejor hacerse un tatuaje de un avión.
Por el momento desconocemos el diseño del tatuaje definitivo, eso sí, como bien podemos ver en la imagen de más arriba, se encuentra justo debajo del “ojo que todo lo ve”. Tendremos que esperar para conocer el resultado del tattoo cuando esté acabado por completo ya que es una parte de una pieza completa del brazo derecho.
¿Qué riesgos supone hacerse un tatuaje en pleno vuelo?
En fin, creo que no hace falta decir que cuando un tatuador está realizado cualquier tipo de tatuaje, sea pequeño, mediano o grande, lo último que necesita es que haya movimiento. Los tatuadores requieren de que el cliente esté lo más quieto posible y puedan apoyarse sobre una superficie fija para poder tener el pulso preciso a la hora de utilizar la máquina de tatuar. Evidentemente, viajar en un avión, no es lo más idóneo. Y es que cualquier turbulencia tirará al traste el tatuaje que se esté realizando y lo que en un principio iba a ser una auténtica obra de arte, podría tener como resultado un tatuaje mediocre que necesite de ser arreglado o tapado/eliminado.