Para estudiosos de los simbolismos del ser humano como Gutierre Tibon, el ombligo del hombre es el asiento del alma, el punto de mayor espiritualidad, su centro; por lo tanto, también es el centro del universo: el centro terrestre, celeste o imaginario. Un centro cosmológico y mágico.
Para hindúes, budistas, hebreos y griegos es el principio de todo, porque el embrión enraíza en él; mientras que para los polinesios es el fin, la marca de la separación del bebé, puesto que se forma tras la caída del cordón umbilical.
Se considera círculo y rectángulo, infierno y paraíso, el lugar del que emana el fuego divino, el centro de la respiración y de la rosa de los vientos. Por todo ello, es una parte del cuerpo muy apropiada para realizarse un tatuaje con un significado profundo para nosotros.
Tatuarte el ombligo
Además, es también un centro erótico, por lo que un tatuaje en el ombligo puede resultar tremendamente sensual. Si el único motivo por el que deseas tatuarte esta zona es puramente estético, debes recordar que es parte del cuerpo que se deteriora con mayor facilidad: un embarazo, hinchazón o aumento de peso pueden deformar el dibujo al dilatar la piel.
Así mismo es una zona con propensión a la formación de estrías, cicatrices y queloides (lesiones de la piel formadas por un crecimiento exagerado de una cicatriz) que terminarían estropeándolo.
Es importante elegir un tatuaje que lo realce, por lo que dibujos en los que el ombligo es un ano están contraindicados para los que busquen un trofeo al buen gusto. Bromas aparte, hay decenas de diseños de tatuajes para el ombligo: simples, complejos, individuales, como parte de uno más grande… el tope es tu imaginación.
Finalmente decirte que es una zona dolorosa, máxime si hay poco tejido graso, pero no debería frenarte si realmente deseas tatuártelo ya que el dolor pasa y el símbolo permanece.
Más información – Un círculo tatuado: la eternidad en tu piel
Fuentes -El ombligo como centro cósmico de Gutierre Tibon.
Fotos – sheplanet.com, tattozone.blogspot.com, glogster.com