Hace unos días os hablé del piercing Monroe o Madonna, pues bien, hoy quiero compartir con vosotros, los varios tipos de piercings que podemos hacernos en la oreja.
Cualquier parte de la oreja es perforable y cada una de ellas tiene un nombre, podemos lucir desde un pendiente pequeño hasta una expansión en el lóbulo, algo de lo que ya hemos hablado.
Concretamente podemos hacernos hasta nueve perforaciones diferentes, que vamos a conocer ahora mismo, en la parte más alta de la oreja encontramos el piercing en el Helix, el industrial y el anti Helix.
Si bajamos un poco más encontramos la perforación Helix interno, el piercing tragus, del que ya os he hablado, el piercing snug, el de la caracola y el anti tragus, y ya en la parte más inferior encontramos el lóbulo, el cual además de perforar se puede dilatar.
Como veis las opciones son muchas, esperamos que os sean de utilidad los nombres y que tengáis en cuenta que algunas de estas perforaciones requieren cuidados más constantes en periodos más largos de tiempo que en otros.
Sed prudentes y no olvidéis que hay que mantener siempre la higiene para evitar infecciones que nos pueden traer consecuencias muy malas para la salud.