Hacerse un tatuaje en la muñeca parece una decisión bastante fácil. Normalmente, este tipo de tatuajes se asocian con diseños pequeños y discretos que solo llevan unos minutos bajo la aguja, con lo que son una opción que adoras los principiantes.
Pero, ¿es todo tan bonito a la hora de hacernos un tatuaje en la muñeca? Como veremos en este artículo, hay una serie de factores que, aunque a primera vista puedan pasar desapercibidos, deberías tener en cuenta.
Un tatuaje en la muñeca no es tan discreto como aparenta
Aunque se relacione con la discreción por su pequeño tamaño, un tatuaje en la muñeca no es tan discreto como aparenta. Piensa que lo más seguro es que asome por las mangas durante todo el año, por ejemplo. Además, está en un lugar en el que siempre te lo verás.
Escoge bien el sitio
Vale, estamos hablando de la muñeca, pero es que la muñeca tiene muchas partes. Si, por ejemplo, vas a tatuarte toda la mano, la parte superior de la muñeca será forzosamente tu opción. Te en cuenta, sin embargo, que el resto de la muñeca es tatuable, pero, al tener tanta movilidad, puede hacer que tu tatuaje se deforme y que no se vea tan bonito.
Para evitarlo, escoge una parte de la muñeca debajo de la articulación o en el antebrazo, donde quedan super bonitos.
Finalmente, la zona de la articulación tarda más en sanarse que el resto (por todo el movimiento que hacemos a lo largo del día) otra razón por lo que es recomendable que escojas la zona con sumo cuidado.
El dolor del tatuaje en la muñeca
Finalmente, aunque un tatuaje en la muñeca es doloroso, no lo es tanto como en otras zonas del cuerpo. El dolor más insoportable, aunque breve, será cuando la aguja te toque los huesos de la muñeca.