Ahora que las largas y frías noches de invierno tocan a su fin y que empieza a percibirse en el ambiente el cálido aroma de la primavera, apetece inspirarnos en motivos naturales para conseguir un diseño chulo y especial. Por eso, hoy hablaremos de los tatuajes de hojas.
Los tatuajes con diseños inspirados en la naturaleza son muy populares, aunque parece que los que se llevan la palma son los que incluyen flores, árboles e incluso paisajes. En este post nos centraremos especialmente en aquellos diseños en los que no aparezca ni una flor y se centren únicamente en las hojas.
Tatuajes de hojas solas sencillos y bonitos
Si buscas un tatuaje de hojas sencillo y bonito, has dado con el diseño ideal. Escoge la hoja de tu árbol favorito (arce, roble, encina…) o alguna planta silvestre que se componga de hojas (como algunos helechos) para conseguir un diseño elegante y discreto.
Estos tatuajes de hojas (o, mejor dicho, de hoja) son ideales para llevar en sitios estrechos como el tobillo o la muñeca y son la mejor opción para aquellos que quieran poner un detalle de la naturaleza en sus cuerpos.
Tatuajes de hojas en enredadera o en ramas
Este tipo de tatuajes acostumbran a ser algo más grandes y pueden llevarse, por ejemplo, enroscados en la muñeca, o, en caso que sean mucho grandes, por todo el cuerpo. Como las llamas o el humo, dan libertad al tatuador y al tatuado para conseguir el efecto que busquen. Así pues, son bastante versátiles y, si están bien hechos, pueden quedar muy chulos.
Si te apetece tener un tatuaje así, piensa en el tipo de enredadera que quieras llevar. Básate en el tamaño de las hojas, ya sean con forma de corona (como las de las vides o enredaderas clásicas) o puntiagudas.
Estas plantas se relacionan con dioses como Baco u Osiris, al que siempre se representaba con un bastón en el que se enroscaba la hiedra. En la cultura celta se relaciona a la hiedra con la muerte y, en la católica, con la resurrección. Antaño, los amantes también tomaron la hiedra como símbolo de su fidelidad.
Tatuajes de hojas grandes y espectaculares
Otra de las opciones que nos plantean los tatuajes de hojas es optar por un diseño que sea muy grande. Para ello, podemos usar todos los diseños de hojas de los que hemos ido hablando (es decir, hojas de arce, enredaderas, vides…) y llevarlos al siguiente nivel.
Si buscas un diseño grande, no hay nada como escoger una hoja bien llamativa. Si tiene colores cálidos, como el rojo, el diseño tendrá un cierto aire otoñal que puede quedar de maravilla en lugares como la pierna o el costado. El tatuador puede usar su maña para crear un tatuaje que tenga movimiento y se enrosque, como una vid, pero solo con hojas.
Otra opción es optar por un diseño compuesto en el que las hojas sean las protagonistas, como en el tatuaje de la foto, en el que las hojas de un árbol ocupan el primer plano y son la zona con más color del tatuaje.
Una simbología tradicional y personal
Ten en cuenta (y esto vale para todos los tatuajes de hojas) que las hojas, al pertenecer a una planta, no están exentas de estar relacionadas con una cierta simbología. De esta manera, no es lo mismo tatuarse una hoja de arce (que puede ser una estupenda muestra de amor por el otoño, el sirope o Canadá) que un trébol de cuatro hojas (o de tres, si eres realmente mainstream), relacionado con la buena suerte.
Por otro lado, las hojas pueden recordarte algún hecho personal que hayas vivido y que quieras inmortalizar para siempre. Por ejemplo, mi novio tiene tatuado una corona minúscula hecha con dos ramas de ginkgo en el glúteo izquierdo para recordar nuestro primer beso (fue en una fiesta, una noche de primavera. En el jardín había un ginkgo enorme).
Y tú, ¿te animas con algún diseño inspirado en estos tatuajes de hojas?