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Los tatuajes de rosa minimalista son una cucada. Siempre sencill0os, sobrios y elegantes, además de tener muchos diseños posibles también puedes colocarse en muchos lugares diferentes.
En este artículo veremos cómo podemos sacar todo el partido de estos tatuajes. ¡Sigue leyendo y verás!
Muchísimos diseños para una sola flor
La rosa, además de ser una de las flores más cargadas de simbolismo de la literatura, el cine y, por supuesto, los tatuajes, también puede ilustrarse de muchísimas maneras diferentes.
Siguiendo este estilo, en el que resultado tiene que ser minimalista (es decir, aparentar sencillez), encontramos algunos diseños que evocan el dinamismo de los esbozos con trazos sueltos y algún toque de color. Otros optan por “construir” la rosa con otros elementos minimalistas, como el origami, que con sus líneas limpias puede crear la ilusión de una rosa de papel sorprendentemente detallada.
El color también puede influir a la hora de dar un toque minimalista pero con profundidad: un buen sombreado con un par de colores puede darle a la rosa minimalista de nuestro diseño un toque que demuestre que en realidad se trata de un diseño aparentemente simple, pero bien terminado.
¿En qué lugares podemos poner esta flor?
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Aunque pueda parecer que los tatuajes de rosa minimalista deben ser pequeños, en realidad pueden ser bastante grandes, siempre y cuando el diseño no se vea terminado a medias. Por eso, aunque lugares estrechos como las muñecas, las manos, los tobillos, el cuelo o la oreja sean los ideales para llevar este tipo de piezas, hay otros que también pueden funcionar para piezas algo mayores.
Por ejemplo, el antebrazo, el cogote, el cuello, o la parte inferior de la pierna son lugares del cuerpo aparentemente grandes y en los que un diseño demasiado pequeño podría perderse, pero uno con un cierto tamaño quedará de maravilla.
Los tatuajes de rosa minimalista son preciosos, ¿verdad? Dinos, ¿llevas algún tatuaje de este estilo? ¡Cuéntanos todo lo que te apetezca en los comentarios!